Una tragedia sacude la ciudad de Barquisimeto, donde una disputa por la custodia de los hijos culminó en un femicidio – suicidio que ha dejado consternada a la comunidad. Un comerciante identificado como Manuel José Gómez Gómez, de 54 años, tomó la vida de su pareja, Bárbara Naybeth Leal Rodríguez y luego se quito la vida, en una residencia cercana a la iglesia Santa Cruz, desencadenando un impactante suceso que involucra a sus tres hijos y las autoridades.
Historia de la disputa: La trágica cadena de eventos se origina en la separación previa de la pareja, que tuvo lugar en Chile. Tras esta separación, Manuel José Gómez Gómez decidió llevarse a las tres hijas consigo. Sin embargo, el destino los llevó a Barquisimeto, donde Bárbara Naybeth Leal Rodríguez, resuelta a disputar la custodia de sus hijos, regresó a la ciudad.
El fatídico encuentro: La presencia de Bárbara en la casa donde se encontraban sus hijos desencadenó una serie de eventos trágicos. En horas del mediodía, el comerciante, al escuchar la presencia de los policías afuera de la residencia y, en particular, al identificar a uno de los funcionarios como miembro de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), tomó una escopeta y disparó contra Bárbara Naybeth Leal Rodríguez, segando su vida de forma abrupta y el hombre se suicidó con una segunda arma de fuego que fue identificada como una pistola .
El llamado de auxilio: Una adolescente de 14 años, que se encontraba en la residencia y fue testigo del atroz acto, llamó la atención de los vecinos y de la PNB, que tenía un comando cercano. Sus gritos de angustia alertaron a las autoridades y a la comunidad sobre la tragedia en curso.
Los hijos, víctimas indirectas: En el momento de los hechos, los tres hijos de la pareja se encontraban en la casa. Después del incidente, fueron trasladados al Hospital Pediátrico Agustín Zubillaga, donde seguramente requerirán apoyo y atención especializada para sobrellevar el trauma de esta trágica experiencia.
Este desgarrador suceso pone de manifiesto la necesidad de abordar de manera urgente y efectiva los problemas relacionados con la violencia de género y las disputas por custodia. Es esencial que las autoridades y la sociedad en su conjunto se involucren en la prevención y el apoyo a las víctimas de la violencia de género. La tragedia en Barquisimeto debe servir como un llamado a la reflexión sobre la importancia de brindar protección a quienes más lo necesitan y trabajar en la construcción de un entorno seguro para todos, sobre todo el de los niños.

