Proponíamos a un amigo, político de alto vuelo, intentar una fórmula inventada por acuciosos del mundo financiero para vadear la acción sancionatoria contra el gobierno venezolano que no tiene por qué castigar al sector privado y menos a quienes con sus capitales pueden impulsar economía y desarrollo.
Hace algún tiempo entrevistamos en Telecaribe a un banquero que ponderaba la expansión de los Fondos Mutuales, como instrumentos de inversión en los que muchos inversionistas individuales unen sus fondos para invertir en activos como acciones, bonos u otros. De allí se nos ocurrió la propuesta de sugerir a diversos gobernantes y políticos de alto nivel, hacer uso del capital político que ostenta el poder para generar desarrollo mediante proyectos capaces per se de destrancar el perverso juego en el que está empantanado el gobierno y arrastra con ello al país todo.
Ayer, como referimos en columna nocturna, el banquero José María Nogueroles, tal vez el más curtido de su mundo, hizo suya esta propuesta salpimentada con su sentencia que es la única forma de superar el escollo que significa la sanción que cierra todos los mercados financieros del mundo occidental y hasta más allá al gobierno de Maduro. Lo que aunado al disparatado y rochelero control de cambio que ni controla ni cambia nada, obstaculiza vías de progreso del país porque este gobierno con su absolutismo tupe los tejidos de interactuación usuales en cualquier economía civilizada.
Proyectos realizables han sido enumerados a diversos personajes a quienes uno supone preocupados por los venezolanos. No digamos que con “pelos y señales” porque como recomendaba Confucio “nunca digas todo lo que sabes” y con ciertos políticos hay que ser cautos, o mejor, con pocos podría serse relajados. El hecho es que transcurren los meses, la crisis aprieta más, el dogal se cierne asfixiante en torno al cuello de los venezolanos y nadie asoma una idea práctica para desatar el nudo gordiano que nos lapida inclemente.
De algo sí estamos seguros. Resuelto el trance vendrán profetas de lo ya acontecido intentando erguirse cual héroes de una épica poco honrosa. Y más grave, quien asuma el control de la pea convocará a estos parlanchines a proseguir hundiendo al país. De momento hay un par de políticos, ninguno oficialista, que sabemos capaces de asir con pundonor esta alternativa del Mercado de Capitales que Dios mediante puede enrumbarnos hacia derroteros menos derrotistas y analizan las ideas.
¿Quién sabe? Es posible que estos dos amigos deduzcan que una cosa conlleva a la otra, pero que no funciona en sentido inverso. Una postura productiva genera capital político aun sin proponérselo, pero no viceversa.
