“En Aragua la violencia no perdona a nadie, ni siquiera a los organismos de seguridad del estado”. La frase es de José Ramón Arias, director del Observatorio de Violencia de Aragua, quien informó que hasta noviembre de este año han sido asesinados 46 policías y funcionarios, adscritos a organismos de seguridad por bandas organizadas y hampa común.
Para la ONG las cifras de este 2018 son alarmantes, porque 2017 cerró con 55 funcionarios muertos de los distintos cuerpos de seguridad, lo que hace presumir que los números podrían ser superiores para finales de año.
Según el balance del año pasado, el organismo de seguridad con mayor número de efectivos asesinados fue la Policía de Aragua, y le siguió en segundo lugar la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
La situación para 2018 no parece ser diferente, porque a la fecha van 46 asesinatos de funcionarios y de ellos 23 son policías.
“Aragua continúa ocupando el segundo lugar a nivel nacional, con el mayor número de funcionarios policiales que mueren en ejercicio de su labor o en las cercanías de su residencia. Es lamentable cómo el ministro de Interior y Justicia y el gobernador anuncian que la inseguridad ha disminuido en el estado, cuando nuestra investigación y las estadísticas arrojan que los niveles de violencia siguen estando muy altos, tanto que los organismos de seguridad son hasta más vulnerables que el resto de los ciudadanos”, expresó Arias.
El último caso se registró este sábado 10 de noviembre, cuando fue asesinado para robarle la pistola José Figuera, supervisor agregado de la Policía de Aragua, en la vía de Zuata, en el municipio Ribas de Aragua.
Nota de Prensa OVA
