Unas 100.000 personas se espera que asistan a la misa funeral del papa emérito, Benedicto XVI, que se celebra hoy en la plaza de San Pedro, entre fuertes medidas de seguridad, según la estimación de la Jefatura de la Policía de Roma.
A las 6 de la mañana se empezó a permitir el acceso a la plaza de San Pedro para los fieles, que lenta y ordenadamente empezaron a tomar asiento ya que no se repartieron entradas para esta ocasión sino que sólo hacía falta ponerse en la fila para entrar en el recinto.