El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, ha firmado una ley con duras medidas contra la migración irregular en el estado del sur de Estados Unidos. Esta acción ha generado especulaciones sobre sus intenciones de postularse a la Casa Blanca en 2024, ya que DeSantis ha destacado por su postura conservadora en temas como la enseñanza, la inmigración y el derecho al aborto.
La ley, que entrará en vigor el 1 de julio, incluye disposiciones como la obligación de utilizar el sistema E-Verify para comprobar el estatus migratorio de los empleados, la recopilación de datos sobre el estatus migratorio en los hospitales y la criminalización del transporte de personas en situación migratoria irregular. En este artículo, examinaremos el contexto político y las repercusiones de esta ley en Florida.
Desarrollo: La nueva ley migratoria en Florida, promovida por el gobernador Ron DeSantis, ha sido justificada como una medida necesaria para abordar la inmigración ilegal y reducir la delincuencia, que según él, es consecuencia de la supuesta “enorme negligencia” de la administración del presidente Joe Biden.
DeSantis ha argumentado su posición mencionando delitos violentos cometidos por “extranjeros ilegales” en el estado y el tráfico de fentanilo desde México, un problema que ha afectado a Florida.
La ley incluye disposiciones controvertidas, como la obligación para las empresas con más de 25 empleados de utilizar el sistema federal E-Verify para verificar el estatus migratorio de los trabajadores. Además, los hospitales que aceptan el seguro público Medicaid deberán recopilar datos sobre el estatus migratorio de los pacientes.
Estas medidas han sido criticadas por defensores de los derechos humanos, quienes argumentan que penalizan a los inmigrantes y crean un clima de miedo que puede llevar a la renuncia o el retraso en la búsqueda de atención médica.
La ley también establece sanciones penales de hasta 15 años de prisión por el transporte de personas en situación migratoria irregular desde otros estados a Florida.
Además, se dejará de reconocer las licencias de conducir emitidas fuera del estado a migrantes que ingresaron al país de forma ilegal, y se prohíbe la financiación de programas locales para otorgar documentos de identidad a esta población.
La aprobación de una ley restrictiva contra la migración irregular en Florida, impulsada por el gobernador Ron DeSantis, ha generado controversia y críticas por parte de defensores de los derechos humanos. Si bien DeSantis ha obtenido apoyo de la mayoría republicana en el estado para impulsar su agenda conservadora, las medidas adoptadas han generado preocupación sobre las consecuencias económicas y sociales.
La imposición de utilizar E-Verify y la obligación de recopilar datos sobre el estatus migratorio en los hospitales podrían afectar negativamente a la economía y el acceso a la atención médica en Florida. Mientras tanto, la firma de esta ley refuerza las especulaciones sobre las aspiraciones políticas de DeSantis, quien se perfila como un posible candidato a la presidencia