La presidenta de la Federación de Colegios de Bionalista de Venezuela, Judith León, reveló en un estudio reciente que el 90% de los laboratorios públicos del país se encuentran “inoperativos”.
Esta alarmante situación pone en evidencia la falta de insumos, materiales y reactivos, así como las condiciones precarias de trabajo y los bajos salarios de los profesionales de la salud.
La falta de recursos y condiciones adecuadas afecta gravemente la funcionalidad de los laboratorios públicos en Venezuela. Según Judith León, solo el 10% de los laboratorios ubicados en centros de salud públicos pueden realizar algún tipo de examen para los pacientes.
Esta deficiencia se debe a la escasez de insumos y materiales, sumada a las precarias condiciones de trabajo y los bajos salarios que reciben los profesionales de la salud.
La crisis también ha alcanzado a los bancos de sangre en el país. Desde 2018, se han realizado múltiples denuncias sobre las condiciones precarias en estos espacios. En 2016, Venezuela contaba con 106 bancos de sangre en funcionamiento, pero en la actualidad solo quedan 58.
La falta de dotación, la migración del personal debido a los bajos salarios y las malas condiciones estructurales son algunos de los problemas que afectan la funcionalidad de los bancos de sangre.
Además, la presidenta de la Federación de Colegios de Bionalista de Venezuela lamenta que más del 60% de los profesionales de laboratorios en instituciones públicas hayan abandonado el país debido a la situación económica que enfrenta la nación. Esta fuga de talento agrava aún más la crisis en el sistema de salud, dejando a Venezuela con una escasez de personal capacitado para atender las necesidades de la población.
La situación de los laboratorios públicos y los bancos de sangre en Venezuela es alarmante. La falta de insumos, materiales y reactivos, junto con las malas condiciones laborales y los bajos salarios, ha llevado al 90% de los laboratorios públicos a estar inoperativos.
La escasez de bancos de sangre y las condiciones precarias en los existentes son otro indicio de la crisis en el sistema de salud. La fuga de profesionales capacitados agrava aún más la situación, dejando al país con una carencia de recursos humanos especializados. Es fundamental que se tomen medidas urgentes para mejorar estas condiciones y garantizar el acceso a servicios de laboratorio y bancos de sangre de calidad en Venezuela.