El gobierno de Venezuela ha expresado su desacuerdo con la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) de autorizar la reanudación de la investigación sobre presuntas violaciones de derechos humanos en el país. En un comunicado, el gobierno venezolano señala que apelará esta decisión ante la Sala de Apelaciones del tribunal, alegando que existe una estrategia liderada por Estados Unidos para utilizar los mecanismos de la justicia penal internacional con fines políticos.
Desarrollo: Según el comunicado difundido por la Cancillería venezolana, el gobierno lamenta que la decisión de la CPI contribuya a esta supuesta maniobra política y cuestiona la razón de ser de la CPI, minando su credibilidad como organismo de justicia internacional. Venezuela insiste en que ha proporcionado información relevante a la CPI y considera que la investigación tiene motivaciones políticas con el objetivo de derrocar al presidente Nicolás Maduro.
Conclusión: En conclusión, el gobierno de Venezuela ha expresado su desacuerdo con la decisión de la Corte Penal Internacional de reanudar la investigación por presuntas violaciones de derechos humanos en el país. El gobierno venezolano apelará esta decisión ante la Sala de Apelaciones de la CPI y denuncia una supuesta instrumentalización política de la justicia penal internacional liderada por Estados Unidos. Además, se cuestiona la credibilidad de la CPI y se señala que la decisión mina su rol como organismo de justicia internacional.