La travesía por la selva de Darién se ha convertido en un camino desafiante y peligroso para los migrantes venezolanos en su búsqueda de oportunidades y seguridad.
A pesar de los altos costos, los riesgos y las amenazas, esta ruta sigue siendo una opción para muchos, reflejando la persistente urgencia de escapar de las dificultades en su país de origen.
Migración Persistente en Medio de Dificultades
La selva de Darién, que conecta Colombia con Panamá, ha sido testigo de un creciente número de migrantes venezolanos que buscan mejores condiciones de vida. A pesar de los riesgos y desafíos extremos en el camino, más de 270 mil personas han emprendido esta peligrosa travesía en lo que va del año, de las cuales un 57% son venezolanos.
El Alto Costo de la Travesía y sus Actores
La ruta migratoria a través de la selva de Darién implica altos costos tanto en términos financieros como en términos de riesgo personal. Además del costo monetario, los migrantes se enfrentan a cobradores de paso y guías de ruta conocidos como “piraguas” y “coyotes”. La falta de pago o la denuncia de irregularidades pueden tener consecuencias amenazadoras.
Amenazas y Decisiones de Vida o Muerte
El caso de Alejandro Ojeda ejemplifica cómo las amenazas y la presión pueden impulsar a los migrantes a tomar decisiones de vida o muerte. Después de enfrentar la selva de Darién y pagar altos costos por su travesía, las amenazas de los “coyotes” lo llevaron a entregarse a las autoridades estadounidenses en busca de protección.
Cifras Impactantes y Factores Determinantes
La magnitud de la migración a través de la selva de Darién es asombrosa. Según las autoridades, cientos de miles de personas han emprendido este peligroso trayecto, en su mayoría venezolanos. La falta de oportunidades laborales, la inseguridad y la intimidación son factores determinantes en la decisión de muchos migrantes.
Persistencia a Pesar de los Obstáculos
A pesar de los riesgos, las amenazas y los desafíos extremos, la migración venezolana a través de la selva de Darién no muestra signos de detenerse, y aunque las autoridades han implementado medidas y programas para abordar la situación, la magnitud de la crisis económica y social en Venezuela continúa impulsando a muchos a buscar un futuro mejor en otras tierras.
La travesía por la selva de Darién representa una difícil y peligrosa decisión para los migrantes venezolanos en busca de una vida mejor, a pesar de los altos costos, las amenazas y los riesgos, la persistencia en esta ruta refleja la urgencia de escapar de las adversidades en Venezuela.
La comunidad internacional y los gobiernos deben tomar medidas estructurales para abordar las causas fundamentales de esta migración y ofrecer soluciones más allá de las respuestas paliativas.