La organización Amnistía Internacional (AI) ha pedido al gobierno de Trinidad y Tobago que detenga la deportación de refugiados y solicitantes de asilo, días después de que las autoridades del país expulsaran a 98 venezolanos.
La crisis de derechos humanos y emergencia humanitaria en Venezuela es de tal magnitud que el 25% de la población nacional se ha visto obligada a huir del país en los últimos años. Los refugiados y solicitantes de asilo que llegan a Trinidad y Tobago huyen de la violencia, la persecución y la pobreza.
El derecho internacional protege a los refugiados y solicitantes de asilo. La Convención de Refugiados de 1951 establece que los refugiados no pueden ser devueltos a países donde su vida o integridad física estarían en riesgo.
La decisión de deportar a 98 venezolanos viola el derecho internacional. Trinidad y Tobago debe respetar el derecho internacional y detener la deportación de refugiados y solicitantes de asilo.
Trinidad y Tobago debe detener la deportación de refugiados y solicitantes de asilo. La decisión de deportar a 98 venezolanos viola el derecho internacional. Trinidad y Tobago debe respetar el derecho internacional y proteger a los refugiados y solicitantes de asilo.
