La protección de los más vulnerables es una premisa fundamental en cualquier sociedad que busca justicia y seguridad para sus ciudadanos, ya que en este contexto, una reciente condena a 30 años de prisión ha marcado un hito en la lucha contra el abuso sexual a menores. Miguel Ángel Morillo Manzano, de 53 años, enfrentará las consecuencias de sus acciones tras haber abusado sexualmente de sus propias sobrinas, de 5 y 9 años de edad.
Veredicto Justo: Respuesta ante el Abuso
El Ministerio Público (MP) ha anunciado una sentencia ejemplar en el caso de Miguel Ángel Morillo Manzano, quien ha sido condenado a 30 años de prisión por el abuso sexual de sus sobrinas menores de edad. Este veredicto no solo establece la gravedad de sus acciones, sino que también resalta la importancia de la justicia y la protección de los más vulnerables en nuestra sociedad.
Un Doloroso Hecho Detectado: Compromiso con la Verdad
La situación que llevó a esta condena fue detectada el 27 de mayo de 2022 en una vivienda del barrio Bella Vista de Acarigua, en el municipio Páez del estado Portuguesa. Ese día, una tía de las niñas observó cómo ambas salían de una habitación junto al hombre condenado, quien había aprovechado su posición de confianza para abusar de ellas. Este hecho doloroso subraya la importancia de estar alerta y comprometidos con la verdad para proteger a los más jóvenes.
Acción Inmediata: Respuesta ante la Emergencia
Ante el descubrimiento del abuso, la tía de las niñas actuó con valentía y responsabilidad. Acudió de inmediato a la sede de la Policía Nacional Bolivariana, quienes detuvieron al acusado y lo pusieron a disposición del Ministerio Público. Esta acción rápida y decidida es un ejemplo de cómo la comunidad puede colaborar en la búsqueda de justicia y la protección de los inocentes.
Justicia Firme: Veredicto Ratificado en Juicio
Durante el juicio, los representantes de la Fiscalía 7ª del segundo circuito de la jurisdicción ratificaron la acusación contra Morillo Manzano. Los delitos de abuso sexual a niña sin penetración agravado y acto sexual con víctima especialmente vulnerable fueron presentados ante el tribunal con pruebas contundentes. Este proceso transparente y justo garantiza que la verdad prevalezca y que se haga justicia en nombre de las víctimas.
La condena de 30 años de prisión impuesta a Miguel Ángel Morillo Manzano establece un precedente en la lucha contra el abuso sexual de menores. Esta sentencia ejemplar subraya la importancia de proteger a los más vulnerables y de garantizar que aquellos que cometen actos atroces enfrenten las consecuencias de sus acciones. La acción rápida de la comunidad y la firmeza de la justicia demuestran que no hay lugar para la impunidad en la protección de los más inocentes.
