Un trágico enfrentamiento tuvo lugar en el estado Falcón, entre la familia de un productor del campo y los miembros de la banda delictiva conocida como “Los Chickateros”. Este violento conflicto ocurrido el domingo 27 de agosto dejó como resultado la lamentable muerte de un productor agropecuario en la zona remota de Santa Cruz de Bucaral.
La noche del 27-A, una confrontación letal se desencadenó en un corral ubicado en La Vega, cerca de los Cogollales, una zona apartada del municipio Unión en Falcón. La familia Castillo se enfrentó a los ataques de la peligrosa banda criminal liderada por Neik Katter Ledezma Castillo, conocido como “El Negrito”. Esta banda ha sido vinculada a diversos delitos, incluyendo extorsiones, robos, actos criminales contra la actividad ganadera y amenazas contra familias productoras en la región.
Este incidente trágico se suma a una serie de eventos violentos que han perturbado la paz en los pueblos y entre los trabajadores de la Sierra del estado Falcón. La región ha sido testigo de una espiral de violencia en los últimos años, causando angustia y preocupación en la comunidad local.
La víctima mortal se identifica preliminarmente como Alejandro Castillo, un productor perteneciente a la familia Castillo. Se menciona que Alejandro es pariente de los hermanos Mauricio Antonio y Leocadio Enrique, quienes fueron asesinados previamente el 26 de febrero en colaboración con un adolescente, en una trama vinculada a la banda “Los Chickateros”.
Dada la ubicación remota de los acontecimientos, las autoridades están desplegando un operativo para investigar el enfrentamiento y sus circunstancias. Comisiones del Cicpc, Guardia Nacional Bolivariana, Policía del estado Falcón y la Policía Nacional Bolivariana han sido movilizadas para esclarecer los hechos y tomar medidas adecuadas.
La banda “Los Chickateros” ha estado operando en varias áreas productoras de Falcón, incluyendo El Tigre, Cogollales, Santa Elena, Cambuyón y otros sectores. Sus actividades delictivas han impactado negativamente a la comunidad local y al sector productivo de la región.
La trágica muerte de un productor agropecuario en el enfrentamiento con la banda criminal “Los Chickateros” resalta la importancia de mantener la seguridad y el orden en las comunidades. Se hace un llamado a las autoridades para tomar medidas efectivas en la prevención y resolución de la violencia, así como en la protección de los productores y sus familias. Es fundamental fomentar un ambiente seguro y colaborativo que permita el desarrollo sostenible y la paz en la región.