Mientras el norte de Maracay se viste de fiesta para las celebraciones de las Ferias de San José, al sur de la ciudad, en la emblemática comunidad de 23 de Enero, la realidad es desoladora. Los residentes se encuentran atrapados en un escenario que parece sacado de las películas del “lejano oeste”, donde el abandono y la falta de atención de las autoridades locales son evidentes.
Desolación en las calles
Tras los trabajos de sustitución de colectores, las calles del sector 23 de Enero han quedado en un estado lamentable. El asfalto escasea y los baches se multiplican, convirtiendo el simple acto de transitar en una odisea para los residentes.
El polvo y la falta de mantenimiento han convertido a estas vías en un escenario poco digno para una comunidad que merece mejores condiciones de vida.
Denuncias y reclamos ignorados
Los residentes, como Enrique Gutiérrez y Luisa Romero, han elevado constantes denuncias y reclamos ante las autoridades locales, sin obtener respuestas satisfactorias. A pesar de utilizar todas las vías posibles, incluida la “VenApp” designada para tal fin, las soluciones parecen estar lejos de llegar.
El abandono de las calles y la falta de atención por parte de las autoridades locales son motivo de indignación y descontento entre los habitantes de 23 de Enero.
Llamado a la acción
Ante esta situación, es imperativo que el alcalde de Girardot, Rafael Morales, tome medidas urgentes para abordar el estado de las calles en el sector 23 de Enero y en toda la ciudad de Maracay. La comunidad merece vivir en condiciones dignas y seguras, y es responsabilidad de las autoridades locales garantizar el bienestar de todos sus ciudadanos. Es hora de dejar de lado la negligencia y tomar acciones concretas para resolver este problema.
Es necesario que las autoridades locales prioricen la atención de las necesidades de la comunidad y asignen los recursos necesarios para mejorar el estado de las calles en el sector 23 de Enero y en toda la ciudad de Maracay.
La falta de mantenimiento y la negligencia no pueden ser excusas para ignorar las demandas legítimas de los ciudadanos. Es hora de actuar con responsabilidad y compromiso para garantizar un entorno seguro y digno para todos.
