la Hidrológica del Centro (Hidrocentro) llevó a cabo el Plan Cayapa en el municipio Mario Briceño Iragorry (MBI), estado Aragua, con el propósito de abordar las necesidades relacionadas con el suministro de agua potable y el manejo de aguas servidas.
Más de 50 mil residentes se beneficiaron de esta iniciativa, que surgió de una colaboración entre el Ministerio del Poder Popular de Atención de las Aguas (MinAguas), Hidrocentro y la alcaldía de MBI.
Esfuerzo conjunto para resolver problemas de agua
La colaboración entre el MinAguas, Hidrocentro y la alcaldía de MBI permitió la ejecución del Plan Cayapa, un esfuerzo conjunto para abordar los problemas relacionados con el suministro de agua potable y el manejo de aguas residuales en la región.
Gracias a la VenApp del 1×10 del Buen Gobierno, se recibieron y atendieron los reportes de los residentes, lo que facilitó la identificación y resolución de los problemas en tiempo récord.
Acciones concretas en las comunidades
Más de 100 trabajadores de la Fuerza Trabajadora del Agua fueron movilizados para abordar los casos reportados, incluyendo reparaciones de fugas de agua potable y problemas con aguas servidas.
Un total de 20 cuadrillas se desplegaron en diversas comunidades, como Caña de Azúcar, La Candelaria, José Félix Ribas, La Coromoto y El Limón, brindando atención directa a los residentes y resolviendo sus necesidades de manera efectiva.
Compromiso con la mejora de los servicios
El presidente de Hidrocentro, Leonel Ruíz, destacó el impacto positivo de las acciones llevadas a cabo en el marco del Plan Cayapa. Gracias a las herramientas proporcionadas por el presidente Nicolás Maduro, se pudo ofrecer una atención primaria de calidad y mejorar los servicios básicos para el bienestar de la población.
Este enfoque refleja el compromiso de Hidrocentro con la mejora continua y la satisfacción de las necesidades de la comunidad.
El éxito del Plan Cayapa en el municipio Mario Briceño Iragorry es un testimonio del poder de la colaboración y la acción coordinada para abordar las necesidades urgentes de la población. Sin embargo, es crucial que estas iniciativas no sean simplemente paliativas, sino que se integren en estrategias a largo plazo para mejorar la infraestructura y los servicios básicos en la región.
Se recomienda una mayor inversión en sistemas de agua y saneamiento, así como una mayor participación comunitaria en la gestión de estos recursos, para garantizar un acceso equitativo y sostenible al agua potable y un manejo adecuado de las aguas residuales en el futuro.