La costa de Venezuela enfrenta una crisis ambiental significativa debido a la invasión del coral Unomia stolonífera, una especie exótica originaria de Indonesia. Este coral, sin depredadores naturales en las aguas del Caribe, ha comenzado a afectar negativamente la pesca y el turismo en la región. Su rápida expansión amenaza con convertirse en un problema de gran escala en todo el Caribe, lo que ha llevado a las autoridades ambientales a tomar medidas urgentes.
La amenaza silenciosa del coral invasor
El Unomia stolonífera ha colonizado extensas áreas en las costas venezolanas, destruyendo los corales pétreos y alterando los ecosistemas marinos. El ministro de Ecosocialismo, Josué Lorca, ha descrito la situación como una “pandemia biológica” debido a la capacidad del coral para desplazar a las especies locales y cambiar el paisaje submarino con su tono oscuro.
Esta invasión ha sido particularmente preocupante en estados costeros como Anzoátegui, donde se han observado extensas áreas afectadas.
Impacto en el Caribe
José Grieco, biólogo marino y coordinador del Proyecto Unomia, explicó que esta es la primera vez que Venezuela enfrenta una proliferación descontrolada de una especie exótica de esta magnitud.
La invasión no solo afecta a Venezuela; ya se han reportado casos en Cuba, República Dominicana y Puerto Rico. Según Grieco, es esencial implementar estrategias de mitigación para controlar la propagación de este coral invasor en toda la región del Caribe.
Acciones y estrategias de mitigación
El gobierno venezolano, en colaboración con la FAO y expertos en ecología, está desarrollando protocolos para controlar y manejar la expansión del Unomia stolonífera.
En una reciente reunión en Anzoátegui, biólogos, ecologistas e investigadores discutieron diversas estrategias y firmaron un compromiso para crear un “protocolo general” que supervise los métodos de control. El objetivo es establecer una metodología uniforme que pueda ser aplicada en toda la región caribeña.
Métodos propuestos
Entre los métodos sugeridos para mitigar la invasión, destaca la colocación de mantos impregnados con un biorremediador sobre el coral. Esta técnica, desarrollada por la profesora Sinatra Salazar de la Universidad de Oriente, mata al coral invasor en unos tres días al privarlo de luz y mediante el uso de un veneno contenido en el plástico del manto.
Salazar enfatiza la importancia de la coordinación entre el Estado y los pescadores para implementar este y otros métodos a gran escala.
Innovación y tecnología en la lucha contra la invasión
La organización Unomia Solutions ha desarrollado varios dispositivos innovadores para erradicar el coral invasor. Entre ellos se encuentran un robot submarino que elimina al coral mientras camina por el fondo marino y mangueras de extracción que remueven el coral del agua.
Jorge García, ingeniero y creador de estos dispositivos, ha dedicado unas mil horas de buceo a investigar esta especie y enfatiza la necesidad de mejorar la velocidad y eficiencia de estos prototipos para enfrentar la crisis a tiempo.
Financiamiento y colaboración internacional
La FAO ha aprobado una contribución de 5.900.000 dólares para el plan de control del Unomia stolonífera. Este financiamiento será gestionado a través del protocolo conjunto liderado por el gobierno venezolano, con la participación de científicos y otras partes interesadas. La colaboración internacional es crucial para abordar esta crisis ambiental y proteger los ecosistemas marinos del Caribe.
La invasión del coral Unomia stolonífera representa una grave amenaza para los ecosistemas marinos y las actividades humanas en las costas del Caribe. La implementación de estrategias de mitigación, el desarrollo de tecnología innovadora y la colaboración internacional son esenciales para controlar esta crisis. Las autoridades y los expertos deben trabajar de manera conjunta para preservar la biodiversidad marina y asegurar un futuro sostenible para las regiones afectadas.