La tensión se apoderó del colegio Helimenas Añez, ubicado en la parroquia Cacique Mara, sector Puerto Rico, cuando los electores, frustrados por la inacción de las autoridades, empezaron disturbios y derribaron el portón de la institución para ejercer su derecho al voto. La situación escaló rápidamente, reflejando la desesperación de los ciudadanos ante un proceso electoral plagado de problemas técnicos y organizativos.
Denuncias de fallas técnicas di{o origen a los disturbios
Desde la mañana, los pocos ciudadanos que lograron votar denunciaron problemas con las máquinas. Aproximadamente 200 personas lograron sufragar hasta las 3:00 p.m., mientras el descontento crecía entre los electores que esperaban su turno. Las máquinas averiadas impidieron que muchos ejercieran su derecho, lo que llevó a un ambiente de frustración y enojo.
Los votantes tuvieron que esperar la llegada de un ingeniero de soporte técnico del Consejo Nacional Electoral (CNE) para reparar las máquinas. Sin embargo, la mesa N°3 continuó sin funcionar, prolongando la espera y aumentando la desesperación entre los presentes. La falta de soluciones rápidas y efectivas exacerbó la tensión en el centro de votación.
Acción de los electores
Ante la inacción de las autoridades y la frustración acumulada, los electores comenzaron a zarandear el portón del colegio. La situación escaló rápidamente cuando, en un acto de desesperación, con disturbios derribaron el portón para ingresar al recinto. La acción reflejó la determinación de los ciudadanos de ejercer su derecho al voto a pesar de las dificultades.
Tras el ingreso forzado de los electores, el Plan República intervino, colocando candados en las puertas y dejando encerrados a cientos de votantes. La medida buscó controlar la situación, pero también añadió una capa de tensión al ambiente ya caldeado. Los funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y el equipo antimotines tomaron el control de la organización del proceso de votación.
Situación actual
El equipo reporteril de Versión Final corroboró la situación en el colegio Helimenas Añez. Actualmente, el proceso de votación se desarrolla bajo la supervisión estricta de las fuerzas de seguridad, mientras los electores buscan ejercer su derecho en un ambiente de alta tensión y control militar. La situación refleja las complejidades y desafíos del proceso electoral en esta región.
La situación en el colegio Helimenas Añez pone de relieve la necesidad urgente de mejorar la organización y la transparencia en los procesos electorales. Las autoridades deben garantizar el funcionamiento adecuado de las máquinas de votación y proporcionar soluciones rápidas ante cualquier fallo técnico.
Además, es crucial fomentar un ambiente de confianza y respeto entre los votantes y las autoridades, evitando la escalada de tensiones y asegurando que todos los ciudadanos puedan ejercer su derecho al voto de manera libre y segura. Implementar programas de formación para el personal electoral y establecer mecanismos de auditoría independientes contribuirán a fortalecer la credibilidad y la legitimidad del proceso electoral en el futuro.
