Un lamentable suceso ocurrió en el sector 24 de Mayo, en el municipio Páez del estado Portuguesa, donde dos niñas, de 10 y 12 años, murieron al recibir una descarga eléctrica mientras recogían la ropa de un tendedero en su hogar. El trágico incidente ha conmocionado a la comunidad local y ha puesto en relieve los peligros asociados con las instalaciones eléctricas improvisadas.
El fatal accidente de las niñas
La tragedia tuvo lugar en la tarde del 5 de agosto, durante una intensa lluvia que azotó la región. Según los informes preliminares, las niñas se encontraban en su domicilio cuando decidieron salir al patio para recoger la ropa que habían dejado secando en un tendedero de alambre. Desafortunadamente, lo que parecía una tarea cotidiana se transformó en un fatídico evento cuando un cable eléctrico improvisado, debilitado por el aguacero, se desprendió e hizo contacto con el tendedero.
El impacto de la descarga eléctrica fue instantáneo y letal. Las niñas cayeron al suelo sin vida, dejando a sus familiares y vecinos en un estado de shock y desesperación. A pesar de la rapidez con la que los servicios de emergencia acudieron al lugar, no hubo nada que pudieran hacer para salvarlas.
Respuesta de las autoridades
Tras el incidente, los bomberos locales se presentaron en la escena para iniciar las investigaciones correspondientes. La gravedad del suceso motivó la intervención de la Coordinación de Delitos Contra las Personas de la policía científica, específicamente la delegación municipal de Acarigua. Los agentes realizaron el levantamiento de los cuerpos, que fueron trasladados a la morgue del Hospital “Dr. Jesús María Casal Ramos” en Acarigua-Araure, donde se llevarán a cabo las autopsias para determinar con exactitud las causas de la muerte.
La comunidad de Payara se encuentra consternada por esta tragedia, que ha dejado un profundo dolor en las familias afectadas y ha generado un llamado de atención sobre las condiciones de seguridad en las instalaciones eléctricas domésticas.
Reflexión sobre las causas y medidas de prevención
Este trágico suceso resalta los peligros latentes que pueden presentarse en el hogar debido a instalaciones eléctricas defectuosas o improvisadas. La combinación de lluvia y electricidad es especialmente peligrosa, ya que el agua actúa como un conductor que puede incrementar el riesgo de electrocución. En zonas rurales, donde a menudo se recurre a soluciones provisionales para problemas eléctricos, es fundamental que las familias tomen medidas preventivas para evitar este tipo de accidentes fatales.
Las autoridades locales y nacionales deben reforzar las campañas de concienciación sobre la importancia de mantener instalaciones eléctricas seguras, especialmente en viviendas que podrían no cumplir con los estándares adecuados. Asimismo, es esencial que las comunidades tengan acceso a asistencia técnica para la revisión y reparación de instalaciones que puedan representar un riesgo para sus habitantes.
La muerte de estas dos niñas es una tragedia que podría haberse evitado con mayor precaución y mejores condiciones de seguridad en el hogar. Este doloroso incidente no solo enluta a sus familias, sino que también debe servir como un recordatorio urgente de la importancia de tomar las medidas necesarias para prevenir accidentes domésticos relacionados con la electricidad. Es crucial que se implementen acciones inmediatas para proteger a las comunidades de futuros incidentes similares y evitar que otras familias sufran pérdidas irreparables.
