En un perturbador caso que ha conmocionado al estado Zulia, funcionarios de la Coordinación de Investigaciones de Delitos Contra las Personas de la Delegación Municipal San Francisco donde unos padres asesinan a su hijo de 4 meses. Las autoridades arrestaron a una joven de 17 años y a José Cueto, de 31 años, y su hijo de cuatro meses, José David Cueto Govea, muerto. El trágico suceso ha puesto de relieve la necesidad urgente de abordar el maltrato infantil en la región.
Hechos que demuestran que los padres asesinan a su hijo
El caso comenzó cuando los padres llevaron al bebé al Hospital Manuel Noriega Trigo, informando que el niño se había caído y no respondía.
Sin embargo, el pequeño falleció a los pocos minutos de recibir atención médica. La Policía Científica, al recibir la notificación, realizó la autopsia, que reveló una realidad mucho más sombría y perturbadora.
Douglas Rico, director del Cicpc, informó que la autopsia determinó que la causa de muerte fue una lesión encefálica hemorrágica, fractura craneal y traumatismo craneoencefálico severo causado por un objeto contuso.
Investigación policial
Ante la gravedad de los hallazgos, el Cicpc inició una investigación exhaustiva. Las pesquisas revelaron que los padres del menor lo agredían regularmente. Se descubrió que el niño sufría golpizas, mordiscos y pellizcos cada vez que lloraba. El día del incidente fatal, una de estas agresiones resultó en su muerte.
Tras el fallecimiento del bebé, los padres intentaron evadir la justicia huyendo del hospital, lo que incrementó las sospechas en su contra.
La búsqueda de la pareja culminó con su arresto en la zona de Limpia Norte, en la parroquia y municipio San Francisco. Ambos fueron puestos a disposición de la Fiscalía 33° del Ministerio Público.
La detención de los padres ha desatado una ola de indignación en la comunidad y ha generado un llamado a la acción para proteger a los niños del maltrato y la violencia doméstica.
Este caso estremecedor resalta la importancia de una vigilancia constante y efectiva para prevenir el maltrato infantil. Es imperativo que se implementen programas de educación y apoyo para padres jóvenes y en riesgo, así como campañas de concienciación sobre los derechos y la protección de los menores.
Las autoridades deben fortalecer los mecanismos de denuncia y respuesta rápida para evitar que tragedias como esta vuelvan a ocurrir. La sociedad en su conjunto tiene la responsabilidad de proteger a los más vulnerables y asegurar que cada niño crezca en un entorno seguro y amoroso.
