El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, ha propuesto la celebración de una cumbre regional de mandatarios en su país para tratar la crisis en Venezuela, que se ha intensificado tras las elecciones presidenciales del 28 de julio. La proclamación de Nicolás Maduro como presidente ha sido objeto de denuncias de fraude, lo que ha llevado a varios países de la región a cuestionar la legitimidad de los resultados y a buscar una solución conjunta.
Propuesta de Panamá
José Raúl Mulino anunció su propuesta a través de un mensaje en la red social X (antes conocida como Twitter), en el que instó al canciller panameño, Javier Martínez Acha, a conversar con sus homólogos sobre la convocatoria de una reunión de presidentes en Panamá.
La intención es discutir la situación en Venezuela y explorar acciones que respalden la democracia y la voluntad popular del país sudamericano. Mulino expresó su esperanza de que la propuesta sea bien recibida y pueda concretarse en el corto plazo.
El 2 de agosto, Mulino se sumó al reconocimiento del candidato opositor Edmundo González Urrutia como el legítimo presidente electo de Venezuela.
Este reconocimiento se produjo después de que el Centro Nacional Electoral (CNE) declarara a Nicolás Maduro como vencedor de las elecciones, en unos comicios que Panamá considera fraudulentos. La postura de Mulino refleja una creciente preocupación regional por la integridad del proceso electoral venezolano.
Apoyo regional a la cumbre
El mismo día que Mulino hizo su anuncio, el Gobierno de Argentina, liderado por Javier Milei, calificó de “interesante” la posible celebración de una cumbre latinoamericana para abordar la situación en Venezuela. Manuel Adorni, portavoz presidencial argentino, destacó la importancia de una reunión de este tipo para coordinar esfuerzos y apoyar una solución democrática en Venezuela.
El CNE de Venezuela, con el 96,87 % de las actas transmitidas, proclamó a Nicolás Maduro como presidente reelecto con el 51,95 % de los votos, mientras que González Urrutia obtuvo el 43,18 % de los sufragios. Sin embargo, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), que agrupa a la oposición mayoritaria, publicó en una página web las actas de los testigos de votación en más del 80 % de las mesas.
Estos documentos, según la oposición, demuestran que su candidato ganó los comicios por un amplio margen. Países como Argentina, Estados Unidos y Perú han reconocido estos resultados alternativos.
Respuesta del gobierno venezolano
El chavismo, que también contó con testigos en las mesas de votación, ha desestimado los documentos presentados por la oposición y no los considera válidos. El lunes siguiente a las elecciones, el CNE entregó las actas de escrutinio al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) para una revisión del resultado, reafirmando la proclamación de Maduro como ganador.
La propuesta de José Raúl Mulino para convocar una cumbre regional de presidentes es un paso significativo hacia la búsqueda de una solución pacífica y democrática para la crisis en Venezuela.
La comunidad internacional debe seguir de cerca los desarrollos en Venezuela y proporcionar el apoyo necesario para facilitar un diálogo inclusivo y constructivo que conduzca a una resolución sostenible del conflicto.
