La economía venezolana ha experimentado una transformación significativa en la manera en que se manejan los pagos. Según el economista Luis Oliveros, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Metropolitana, cerca del 97% de los bolívares en circulación se mueven a través de plataformas digitales. Esta digitalización ha sido impulsada por los avances en la banca y la adopción generalizada de herramientas como el pago móvil y las tarjetas, marcando un cambio notable en el manejo del dinero en el país.
El auge de la banca digital
Luis Oliveros destacó el papel crucial que ha jugado el sector bancario en facilitar la transición hacia una economía digital. La creación y expansión de medios de pago electrónicos han permitido a los venezolanos realizar transacciones con mayor comodidad y seguridad, especialmente en un contexto económico complejo como el de Venezuela. Según los datos más recientes del Banco Central de Venezuela, el 96,49% del dinero que circula en la economía nacional se maneja a través de plataformas digitales, lo que subraya el éxito de estos esfuerzos.
Esta tendencia hacia la digitalización no solo ha mejorado la eficiencia de las transacciones, sino que también ha ofrecido una solución frente a la escasez de efectivo, un problema que ha afectado al país durante años. El uso de herramientas como el pago móvil se ha convertido en una necesidad, permitiendo a los ciudadanos realizar sus compras diarias sin depender del efectivo físico.
Ampliación de los bolívares en el cono monetario
En este nuevo entorno económico, la ampliación del cono monetario también ha jugado un papel relevante. Oliveros señaló la incorporación de billetes de mayor denominación, como los de 200 y 500 bolívares, como un paso positivo. Estos billetes han facilitado las transacciones en efectivo, especialmente en pagos de menor cuantía, donde la necesidad de un billete de alta denominación es menos frecuente.
Sin embargo, aunque el uso de efectivo ha disminuido, sigue siendo una parte importante de la economía, especialmente en áreas donde el acceso a la banca digital es limitado. La introducción de billetes de mayor denominación ha ayudado a reducir la presión sobre los usuarios de efectivo, aunque la mayoría de las transacciones continúan realizándose de forma digital.
Desafíos en la accesibilidad a bolívares y el uso de divisas
A pesar de estos avances, Oliveros también subrayó la falta de empatía por parte de algunos sectores en cuanto a la accesibilidad de las divisas y el estado de los billetes en circulación. Dado que las divisas se han convertido en la segunda forma de pago más común en el país, es crucial que tanto los comerciantes como los consumidores tengan en cuenta las dificultades que enfrentan algunos ciudadanos para acceder a monedas extranjeras y la calidad del dinero en efectivo disponible.
Este desafío pone de relieve la necesidad de un enfoque más inclusivo que permita a todos los venezolanos participar plenamente en la economía, independientemente de su acceso a medios digitales o divisas extranjeras.
La economía venezolana está experimentando una transformación significativa hacia la digitalización, con casi el 97% de los bolívares circulando en cuentas digitales. Aunque esta tendencia ha mejorado la eficiencia de las transacciones y ha ayudado a mitigar la escasez de efectivo, sigue habiendo desafíos en la accesibilidad a divisas y en el uso del efectivo. A medida que el país avanza hacia una mayor digitalización, será crucial abordar estas dificultades para asegurar que todos los ciudadanos puedan beneficiarse de los cambios en el sistema financiero.
