El Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio) ha hecho un llamado urgente a las autoridades para implementar una “reforma tributaria profunda e integral”. Esta medida tiene como objetivo principal combatir la informalidad económica en el país, que representa un desafío creciente para el sector formal de comercio y servicios. Según el gremio, la informalidad, que opera al margen de las leyes fiscales y laborales, genera competencia desleal y afecta el desarrollo económico de Venezuela.
Propuesta de Consecomercio
Durante un encuentro con representantes del sector automotriz, el presidente de Consecomercio, Gustavo Valecillos, destacó la necesidad de una reforma fiscal que permita formalizar las actividades económicas en todos los niveles. Según Valecillos, “es crucial que cualquier actividad económica, por pequeña que sea, cumpla con las normativas legales”, ya que solo de esta forma se podrán obtener los resultados esperados: crecimiento económico y un entorno de negocios más equitativo.
Valecillos también señaló que la reforma debe ser integral, es decir, no solo enfocarse en aumentar los tributos, sino en incentivar la actividad económica formal, permitiendo a las empresas desarrollarse dentro del marco legal. De esta manera, se busca fortalecer tanto al sector privado como la recaudación fiscal, pero a través del crecimiento económico y no simplemente mediante un aumento de las tasas impositivas.
El impacto de la informalidad, según Consecomercio
El presidente de Consecomercio subrayó que la informalidad económica en Venezuela representa una competencia desleal para los comercios y servicios establecidos formalmente. Al operar al margen de las regulaciones fiscales, las actividades informales evaden impuestos y otras obligaciones legales, afectando gravemente a las empresas que sí cumplen con la normativa vigente.
Este fenómeno, según Valecillos, no solo genera un entorno de negocios desigual, sino que también limita la capacidad del país para generar ingresos fiscales y garantizar los derechos laborales de los trabajadores en el sector informal. La propuesta de Consecomercio apunta a que una mayor formalización permitiría mejorar la convivencia económica y fomentar un entorno de negocios más estable.
El enfoque de la Cámara Nacional de Talleres Mecánicos
En consonancia con las propuestas de Consecomercio, el vicepresidente de la Cámara Nacional de Talleres Mecánicos (Canatame), Angelo Sangregorio, expuso los planes de su sector para combatir la informalidad. Según Sangregorio, la certificación de mecánicos y talleres es una de las principales estrategias que impulsarán durante el período 2024-2025.
Sangregorio señaló que formalizar los talleres mecánicos y garantizar que cumplan con las normativas vigentes no solo contribuirá a reducir la informalidad en el sector, sino que también mejorará la calidad del servicio para los consumidores. Este enfoque de certificación y regulación es visto como un paso crucial para garantizar que el sector automotriz opere dentro de la legalidad.
La carga fiscal sobre las empresas
Otro aspecto importante en el debate sobre la reforma tributaria es la “alta carga fiscal” que enfrentan las empresas en Venezuela, una situación que ha sido denunciada repetidamente por organizaciones como Conindustria. Según el gremio industrial, los elevados tributos están estrangulando el crecimiento de las empresas y limitando su capacidad para reinvertir en sus operaciones, mejorar salarios o adquirir nuevos equipos.
Conindustria ha insistido en que cualquier aumento en la recaudación fiscal debe provenir de una mayor actividad económica, no de un incremento de las tasas impositivas. La Asociación Venezolana de Derecho Tributario (AVDT) comparte esta visión y estima que las empresas destinan, en promedio, el 80 % de sus ganancias al pago de tributos, lo que deja muy poco margen para otros gastos necesarios.
La propuesta de reforma tributaria de Consecomercio busca formalizar el sector económico y combatir la creciente informalidad que afecta tanto a los comercios como a los servicios en Venezuela. Para lograrlo, se necesita una reforma integral que no solo aumente la recaudación fiscal, sino que también incentive el crecimiento económico y mejore la competitividad de las empresas. Sin embargo, esta reforma deberá tener en cuenta la ya elevada carga fiscal que enfrentan las empresas, y garantizar que cualquier medida implemente un equilibrio entre la recaudación y el crecimiento sostenido.