En un operativo reciente, el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) abatió a Alejandro José Mota Pulido, un hombre de 34 años señalado de estrangular a su expareja, Daisy Marinela Montoya Ceverg. El trágico desenlace se produjo el 9 de octubre en la parroquia Aguas Calientes, municipio Diego Ibarra. Este suceso pone de manifiesto la lucha constante de las autoridades contra la violencia de género y la necesidad de justicia para las víctimas.
Contexto del homicidio
El asesinato de Daisy Montoya ocurrió el 6 de octubre en su hogar, ubicado en el sector Mariscal Sucre. La discusión entre la pareja, provocada por la negativa de Mota Pulido a aceptar la ruptura, escaló rápidamente en violencia.
Según el comisario Douglas Rico, el joven hijo de Daisy intentó intervenir, pero su llegada fue demasiado tarde. Al forzar la entrada, encontró a su madre sin vida, lo que desencadenó una serie de eventos que culminarían en la muerte del sospechoso.
El Enfrentamiento con el Cicpc
Tras el crimen, Mota Pulido se dio a la fuga y fue finalmente localizado por los funcionarios del Cicpc. Al ser abordado por la policía en Aguas Calientes, el sospechoso reaccionó disparando su arma, lo que dio inicio a un intercambio de tiros.
El director nacional del Cicpc, Douglas Rico, explicó que, al verse acorralado, Mota Pulido fue herido en el enfrentamiento. Posteriormente, fue trasladado al hospital Simón Bolívar de Mariara, donde falleció debido a sus heridas.
La vida de la víctima
Daisy Marinela Montoya, de 42 años, era madre y había estado sufriendo las consecuencias de una relación tóxica. Su asesinato resalta la grave problemática de la violencia de género que persiste en muchas comunidades. Mota Pulido contaba con antecedentes por violencia, lo que añade un matiz alarmante a la situación. La fiscalía 27ª del Ministerio Público en Carabobo ahora se ocupa del caso, buscando justicia para la víctima y su familia.
Este trágico evento ha suscitado reacciones en la comunidad local, donde muchos expresan su preocupación por la violencia doméstica. La historia de Daisy es un recordatorio de la importancia de la prevención y la intervención temprana en situaciones de abuso. Las autoridades han reiterado su compromiso de enfrentar estos delitos y proteger a quienes están en riesgo.
El caso de Alejandro José Mota Pulido y Daisy Marinela Montoya es una tragedia que no solo afectó a sus familias, sino también a la sociedad en su conjunto. La respuesta contundente del Cicpc evidencia la importancia de combatir la violencia en todas sus formas. Sin embargo, también subraya la necesidad de un enfoque integral que incluya la educación y el apoyo a las víctimas, para evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro.
La lucha contra la violencia de género continúa siendo una prioridad, y es fundamental que tanto las autoridades como la comunidad trabajen de la mano para construir un entorno más seguro para todos.