Víctor Manuel Méndez Morillo, conocido como “Vitico”, fue recapturado en Caracas tras 14 años prófugo de la justicia. Implicado en el asesinato de Alejandro Fermín Royé, hijo del dirigente político Claudio Fermín, Méndez Morillo había logrado evadir a las autoridades con una identidad falsa. El crimen, ocurrido en 2013, dejó a la sociedad venezolana conmocionada y durante más de una década, el homicida permaneció en la clandestinidad hasta su reciente arresto en octubre de 2024.
El asesinato de Alejandro Fermín Royé
El 3 de febrero de 2013, unos delincuentes asesinaron brutalmente a Alejandro Fermín Royé durante un intento de robo en la urbanización La Estancia de Los Chorros, en el estado Miranda. Esa noche, tres delincuentes, entre ellos Víctor Manuel Méndez Morillo, interceptaron a Fermín Royé con la intención de despojarlo de su vehículo. Durante el ataque, el joven recibió múltiples disparos que le causaron la muerte en el lugar. Este trágico suceso marcó a la familia Fermín y desató una intensa búsqueda para llevar a los responsables ante la justicia.
Sin embargo, Víctor Manuel Méndez Morillo logró escapar de las autoridades, y en 2010 ya se había fugado de la cárcel de Yare 1, donde cumplía condena por otros delitos. Su capacidad para mantenerse oculto y utilizar identidades falsas le permitió permanecer libre por más de una década, hasta que finalmente lo recapturaron.
El arresto tras años en fuga por el asesinato del hijo de Claudio Fermín
El pasado 17 de octubre de 2024, funcionarios de la Dirección de Investigación Penal (DIP) y de Acciones Estratégicas y Tácticas de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) seguían la pista de una peligrosa banda en Caracas, cuando detectaron la presencia de un hombre que les resultó sospechoso. Al abordarlo, el sujeto se identificó como John German Escalona Bello, presentando una notificación de extravío de documentos y actuando de manera nerviosa durante el interrogatorio.
Las inconsistencias en sus respuestas y su comportamiento levantaron las sospechas de los agentes, quienes procedieron a verificar su identidad en el Sistema Integrado de Información Policial (SIIPOL). Para sorpresa de los funcionarios, el sistema arrojó que el hombre era, en realidad, Víctor Manuel Méndez Morillo, prófugo por el asesinato de Alejandro Fermín Royé y evadido del penal de Yare 1 desde 2010.
Las pruebas que lo delataron
Durante el arresto de Méndez Morillo, las autoridades incautaron varios documentos falsos, entre ellos una licencia de conducir y un certificado médico vial a nombre de John German Escalona Bello, identidad que había utilizado durante años para evadir la captura. Además, se le encontró un teléfono celular que podría contener información relevante para las investigaciones en curso.
Las autoridades ahora trabajan en determinar si Méndez Morillo está relacionado con otros delitos durante su tiempo en fuga, así como en identificar posibles cómplices que lo hayan ayudado a mantenerse oculto durante estos 14 años.
Justicia pendiente
Con la captura de Víctor Manuel Méndez Morillo, las autoridades esperan que se haga justicia para la familia de Alejandro Fermín Royé, quien perdió la vida en circunstancias trágicas. El detenido será procesado nuevamente por su participación en el homicidio y por otros delitos que pesan en su contra.
Este arresto representa un paso importante en la lucha contra la impunidad en Venezuela y un cierre parcial para un caso que mantuvo en vilo a la sociedad durante más de una década. Las autoridades continúan sus investigaciones para esclarecer todos los detalles sobre los años que Méndez Morillo pasó oculto y las redes de apoyo que pudo haber utilizado.