El bolívar, cerró el año 2024 con una devaluación del 30,9% frente al dólar en el mercado oficial, alcanzando un valor de 52 bolívares por unidad. Este comportamiento refleja una tendencia de pérdida de poder adquisitivo, acompañada por un incremento acelerado en el precio de la divisa estadounidense durante el último trimestre del año. Aunque la devaluación fue menor que en 2023, el impacto en el poder de compra de los venezolanos sigue siendo significativo.
El dólar como referencia en la economía venezolana
De acuerdo con cifras del Banco Central de Venezuela (BCV), el precio del dólar oficial comenzó el año en 35,9 bolívares y aumentó un 44,8 %, cerrando en 52 bolívares en la última jornada hábil de diciembre. Este incremento se aceleró particularmente a partir de octubre, cuando la divisa norteamericana experimentó una alza sostenida que repercutió en los costos de bienes y servicios, que se calculan principalmente en dólares en el país.
En el mercado paralelo, que tiene gran influencia en las transacciones diarias, el dólar alcanzó un promedio de 66,2 bolívares, representando un aumento del 70% respecto a enero. Esto evidencia una presión cambiaria aún más fuerte en este ámbito, donde la cotización de la moneda extranjera supera significativamente a la oficial.
Menor devaluación, pero con impacto social profundo
Aunque la pérdida de valor del bolívar fue menor en comparación con el 51% registrado en 2023, las consecuencias económicas siguen siendo adversas. La caída del poder adquisitivo es palpable, especialmente considerando que el salario mínimo y las pensiones se mantienen en 130 bolívares, equivalentes a solo 2,5 dólares mensuales según la tasa oficial actual.
Además, aunque el uso del bolívar ha repuntado en transacciones, según datos de la firma Ecoanalítica, el interés del mercado por fijar precios y ahorrar en divisas sigue siendo predominante. En noviembre, solo el 24,7 % de las operaciones se realizaron en moneda extranjera, un porcentaje significativamente menor al 60 % registrado en 2021, lo que indica cierta recuperación del bolívar en términos operativos.
Perspectivas económicas para el futuro con el dólar
La estabilidad relativa de la moneda nacional durante la primera mitad del año generó expectativas de recuperación, pero la aceleración en la subida del dólar en el último trimestre dejó en evidencia la fragilidad estructural de la economía venezolana.
La recuperación del bolívar en algunas transacciones comerciales podría interpretarse como un intento del gobierno por fortalecer su uso. Sin embargo, los expertos advierten que, sin medidas estructurales más amplias, la dolarización informal seguirá siendo una realidad ineludible para gran parte de la población.
El 2024 cierra con un panorama complejo para el bolívar, que aunque registró una menor devaluación que el año anterior, sigue perdiendo terreno frente al dólar y limitando las posibilidades económicas de los venezolanos. La recuperación de la estabilidad monetaria y del poder adquisitivo dependerá de la implementación de políticas estructurales que reduzcan la dependencia de la economía venezolana hacia la divisa extranjera.
