La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha dado un paso crucial en la lucha contra la mpox, antes conocida como viruela del mono. El 13 de septiembre, el organismo aprobó la primera vacuna contra esta enfermedad, avalando su seguridad y eficacia. La medida llega en medio de un alarmante brote en la República Democrática del Congo y de otros focos de contagio en diversas partes del mundo, lo que ha generado preocupación en la comunidad internacional. La precalificación de esta vacuna facilitará su adquisición por gobiernos y organismos como UNICEF, asegurando que llegue a las poblaciones más necesitadas.
Precalificación de la OMS a la vacuna: Un avance clave
La OMS ha basado su decisión en la información proporcionada por el fabricante de la vacuna, Bavarian Nordic, y en la revisión de la Agencia Europea de Medicamentos.
Este aval asegura que la vacuna cumple con los estándares internacionales de seguridad y eficacia. La precalificación es un paso fundamental para que la vacuna pueda ser adquirida y distribuida de manera más eficiente por países con menores recursos y por organizaciones globales como la alianza GAVI, dedicada a la inmunización en zonas vulnerables.
Brote de mpox: Un desafío global
El brote actual de mpox ha afectado gravemente a la República Democrática del Congo, donde la enfermedad ha sido declarada una emergencia de salud pública desde agosto. Aunque este brote es el más preocupante, la situación no se limita a este país.
En total, más de 120 países han reportado casos desde el último brote en 2022, con un total de más de 103,000 casos confirmados y sospechosos, y 723 muertes solo en África este año. Este contexto ha hecho urgente la implementación de medidas preventivas como la vacunación.
OMS promueve el acceso a la vacuna para poblaciones vulnerables
La precalificación de la vacuna por parte de la OMS permitirá que los países más desfavorecidos puedan acceder a ella de manera más rápida y efectiva. Las organizaciones internacionales, como UNICEF y GAVI, podrán adquirir el fármaco y facilitar su distribución en las comunidades más afectadas.
La vacuna está diseñada para ser administrada a mayores de 18 años en dos dosis inyectables, con un intervalo de cuatro semanas entre ambas. Aunque no está aprobada para menores, la OMS ha considerado su uso en casos especiales, como en lactantes, niños y personas inmunodeprimidas en situaciones de alto riesgo.
Eficacia de la vacunación
Los estudios realizados han demostrado que la vacuna es altamente efectiva cuando se administra antes de la exposición al virus. Una sola dosis tiene una efectividad del 76 %, que aumenta al 82 % con la segunda dosis. Sin embargo, cuando la vacunación ocurre después de la exposición, su eficacia disminuye. Ante la limitada oferta mundial de la vacuna, la OMS ha sugerido que, en caso de brotes, una sola dosis podría ser utilizada como medida temporal para contener la propagación del virus.
La aprobación de la vacuna contra la mpox por la OMS representa un hito importante en la lucha contra esta enfermedad, especialmente en un momento en que los brotes se han intensificado. La precalificación no solo asegura que la vacuna es segura y eficaz, sino que también abre la puerta a una distribución más equitativa en países con recursos limitados. Con este avance, la comunidad internacional está un paso más cerca de contener la propagación de la mpox y proteger a las poblaciones más vulnerables.