La tarde del 8 de febrero se convirtió en una tragedia en el municipio Girardot, estado Aragua. Lo que comenzó como un simple reclamo terminó en un acto de violencia fatal. Maykolc Díaz, de 29 años, perdió la vida tras ser apuñalado por José Daniel Quijada Silva, de 24 años, debido a una disputa por una deuda de apenas cinco dólares.
Un encuentro fatal
Según relataron testigos, Díaz se encontraba en su comunidad cuando Quijada Silva lo interceptó para exigirle el pago del dinero que le debía. La conversación escaló rápidamente a una acalorada discusión, que en cuestión de segundos se transformó en una riña.
Quijada, cegado por la furia, sacó un arma blanca y le asestó una puñalada en el pecho a Díaz, quien cayó gravemente herido en medio de la mirada atónita de los presentes.
El escape y la desesperación
Tras el ataque, Quijada Silva huyó del lugar, dejando a su víctima desangrándose en el suelo. Vecinos y familiares corrieron para auxiliar a Díaz, trasladándolo de inmediato al Seguro Social de San José con la esperanza de salvar su vida. Sin embargo, las heridas fueron demasiado graves y falleció al momento de ser atendido.
Una investigación que llevó a la captura
El caso conmocionó a la comunidad y rápidamente se activó un operativo por parte del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para dar con el paradero del agresor.
Tras realizar experticias forenses y entrevistas a testigos, los funcionarios lograron determinar que Quijada Silva había escapado con rumbo desconocido. No obstante, el despliegue policial permitió ubicarlo y detenerlo pocos días después.
El director del Cicpc, Douglas Rico, confirmó la captura y aseguró que Quijada Silva quedó a disposición de la Fiscalía Superior del Ministerio Público del estado Aragua, donde enfrentará cargos por homicidio.
Un crimen que indigna a la comunidad
El asesinato de Maykolc Díaz ha causado indignación y consternación entre los habitantes del municipio Girardot. La violencia desatada por una cantidad de dinero tan mínima refleja los niveles de tensión y agresividad que pueden surgir en la sociedad actual.
El caso deja una dura lección sobre cómo la violencia y la intolerancia pueden convertir una discusión cotidiana en una tragedia irreversible. Ahora, la justicia deberá determinar la sentencia para Quijada Silva, mientras los familiares de la víctima lloran la pérdida de un ser querido por un motivo que nunca debió costarle la vida.
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