El barrio Independencia, en Maracay, estado Aragua, ha sido testigo de un deterioro progresivo en sus calles, principalmente debido a reparaciones incompletas de los colectores de aguas servidas. Los residentes han reportado que, tras la intervención, las calles quedan rotas y no se procede con el asfaltado correspondiente, generando una problemática que lleva más de un año afectando a la comunidad.
Deterioro de las vías y su impacto
Luz Fuentes, una vecina de la calle K, señala que esta vía es una arteria principal por donde transitan numerosos vehículos, incluyendo ambulancias y otros servicios esenciales. La falta de pavimentación no solo dificulta el tránsito, sino que también pone en riesgo la integridad de los peatones y los automóviles que deben cruzar por la zona deteriorada.
“Esto es insoportable, estas calles están todas destruidas, esto es un pedazo que realmente ya no se soporta esta situación, ya viene casi un año”, comentó Fuentes.
Impacto en la salud
El deterioro de las calles ha tenido repercusiones más allá de la infraestructura, afectando directamente la salud de los habitantes. La falta de pavimento ha provocado que la tierra seca se convierta en polvo, exacerbando las condiciones respiratorias de los residentes, especialmente aquellos que padecen asma y alergias.
A pesar de los esfuerzos por sellar puertas y ventanas, el polvo penetra en las viviendas, empeorando la calidad del aire y, en consecuencia, la salud de los vecinos.
Teresa Landaeta, otra residente afectada, menciona que la constante exposición al polvo ha agravado su asma, causando crisis frecuentes. “Ya tenemos tiempo con esto así sin asfaltar y eso nos hace daño por el polvo, por lo menos yo que tengo alergias; vivo con una crisis de asma y necesito que acomoden eso”, declaró Landaeta.
Además, la gripe se ha convertido en un problema común debido al polvillo constante, a pesar de los intentos de los vecinos por mitigar el problema rociando agua, que rápidamente se evapora con el sol.
Impacto de la temporada de lluvias
La situación se agrava aún más durante la temporada de lluvias, cuando la calle K se transforma en un peligroso lodazal. La acumulación de agua en las vías sin pavimentar genera lodo resbaladizo, provocando accidentes tanto de peatones como de motociclistas.
Yesenia Ladera, cuya vivienda se encuentra en la esquina de la calle, describe la problemática de las inundaciones: “Por aquí pasan personas mayores, pasan niños, pasan en coches, en bicicleta, aquí ha habido accidentes en moto porque esto cuando llueve el lodo de verdad que no se aguanta”.
La constante exposición al tránsito vehicular agrava los baches en las calles, obligando a los residentes a improvisar soluciones temporales con arena y piedra.
Sin embargo, estas medidas no son suficientes para garantizar la seguridad de quienes transitan por la zona, especialmente durante las lluvias intensas que amenazan con inundar las casas cercanas.
Exigencia de soluciones
La comunidad del barrio Independencia ha elevado su voz para exigir una solución inmediata a esta problemática. Los residentes demandan a las autoridades municipales y gubernamentales que se enfoquen en la reparación y asfaltado de las calles afectadas para garantizar la salud y seguridad de todos los habitantes.
La urgencia de estas reparaciones no solo busca mejorar la infraestructura vial, sino también preservar la calidad de vida de los ciudadanos, quienes han soportado las consecuencias del abandono por demasiado tiempo.
Es imperativo que las autoridades locales prioricen la rehabilitación de las calles en el barrio Independencia. Se recomienda implementar un plan de acción inmediato que incluya el reasfaltado completo de las vías dañadas y la implementación de medidas preventivas para evitar futuros deterioros.
Además, se sugiere la creación de programas de mantenimiento regular y la participación activa de la comunidad en la vigilancia y reporte de problemas viales. La mejora de la infraestructura no solo beneficiará a los residentes en términos de movilidad y seguridad, sino que también contribuirá a un entorno más saludable y a una mejor calidad de vida para todos.